Vendanges dans les vignes, Aude ©Céline Deschamps-ADT de l'Aude

Una tierra de bodegueros

Una tierra para recorrer con tranquilidad. Se puede pasear por los antiguos pueblos de Corbières y Minervois, donde los más epicúreos disfrutarán degustando los vinos y otras delicias locales (miel, quesos, aceitunas, etc.). Encuentros sencillos y auténticos con los bodegueros y productores de la tierra a la que dos grandes «crus», Minervois y Corbières, han dado su nombre. Al sur, Fitou ha sabido labrarse un nombre en el rico macizo de los altos Corbières.

Un rico patrimonio

La belleza salvaje de los Corbières ha servido de decorado para la historia. La abadía de Lagrasse y su pueblo medieval, que pertenece a los «Pueblos más bonitos de Francia» como Fontfroide, las «Ciudades del Vértigo» como Peyrepertuse, Quéribus, Termes, Villerouge-Termenès son algunas de las joyas imprescindibles para los visitantes que busquen nuevas emociones.

Découvrir l'Abbaye de Lagrasse©Vincent Photographie

Y una naturaleza protegida

Los amantes del deporte y de la naturaleza estarán encantados con los casi 600 km de rutas de senderismo señalizadas para realiza andando, en bicicleta o BTT.
Visiter l'abbaye de Fontfroide à Narbonne ©Rogier Fackeldey-Abbaye de Fontfroide

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Le village d'Argens Minervois ©Gilles Deschamps

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Costa Mediterránea

La Narbonnaise debe su nombre a la ciudad de Narbona, antigua capital de provincia romana. La ciudad cuenta con un patrimonio histórico y arquitectónico excepcional (Horreum Romain, Via Domitia, Palacio de los Arzobispos, catedral gótica, casco antiguo, Canal de la Robine).

La Narbonnaise también tiene 50 km de playas de arena con sorprendentes decorados: los macizos de los Corbières y de la Clape en el interior, las lagunas que sobrevuelan los flamencos rosas, el ambiente festivo y familiar de las localidades costeras de Gruissan, Leucate, Port-La Nouvelle, Narbonne-plage y Saint-Pierre-la-Mer. Cuando el viento se calma, y todo se relaja, ¿por qué no disfrutar de un día de baño y sol en familia en este sorprendente Mediterráneo?

Randonnée dans la Clape ©D. Cosperec-Villemarcheurs

El litoral de Aude también atrae a los amantes de la naturaleza: el Parque Natural Regional de la Narbonnaise en el Mediterráneo es ideal para el senderismo, las escapadas en bicicleta, la escalada… en espacios naturales con una fauna y una flora protegida, ¡a solo unos metros de las playas! Los aficionados al birdwatching quedarán encantados, la región es el refugio de numerosas especies de aves que se pueden observar en pequeños grupos (¡sin molestarles!)

Lugares extraordinarios para deslizarse

Y no olvidemos que las playas de Aude son lugares muy frecuentados por los riders de kitesurf y windsurf procedentes de todos los rincones del mundo. Estos deportes combinan la práctica en estanques y en el mar, con todos los grados de dificultad, desde principiantes hasta campeones del mundo. Las localidades de Leucate y Gruissan a la cabeza, son «el» destino con el viento en popa.

Kitesurfer à Leucate, la Franqui ©Office de Tourisme de Leucate